La Dirección General de Energía de la Conselleria de Infraestructuras y Transporte ha resuelto favorablemente la solicitud de Iberdrola para construir una línea de alta tensión que cruzará parte de la Vall d’Albaida, en algunas zonas de alto valor paisajístico, como la Covalta, la font del Patge, o la Serra del Torrater hasta llegar al pou clar.
La Generalitat Valenciana autoriza, de este modo, la construcción de una línea de alta tensión de 132 kilovatios que tendrá tramos aéreos y otros subterráneos y que atravesará los términos municipales de Albaida, Benissoda, Agullent y Ontinyent, conectando la denominada “ST Onteniente”con la “Juan Urrutia-Alcoy”.
El proyecto prevé un trazado de 12,3 kilometros de instalación eléctrica de los cuales 11,7 discurrirán de forma aérea mientras que 621 metros restantes quedarán enterrados.
La mayor parte del tendido eléctrico que se va a instalar será visible en zonas emblemáticas como la Covalta o la parte baja de la Serra del Torrater, precisamente donde se conserva la última vegetación boscosa que se salvó del desastre de los incendios de julio de 1994 que asolaron el término municipal de Ontinyent.
El proyecto cuenta con un presupuesto de 2,6 millones de euros y su objetivo es reforzar el suministro eléctrico en las comarcas del interior.
La autorización administrativa contempla la “utilidad publica” del proyecto, aunque la resolución no es en firme y contra ella, todavia puede interponerse en el plazo de un mes recurso de alzada ante el Secretario Autonómico de Infraestructuras y Transportes.
Precisamente algunos vecinos afectados se han puesto en contacto con algunos medios de comunicación para exponer su crítica ante un proyecto que “nos hipoteca de cara al futuro”. Según estos vecinos críticos con la nueva linea eléctrica la misma”cruzara la sierra por la mitad obligando a cortar pinos en una zona que es el único espacio verde que nos queda después de los incendios”. Estas voces que se oponen a la construcción de la línea explican que “podrian contemplarse otras alternativas como enterrar buena parte de las instalaciones. Aunque también se produciría un perjuicio para nuestras sierras y parajes, éste sería menos y siempre podría ser repuesto con repoblaciones posteriores. Pero está claro que esta alternativa es más costosa y seguramente, no interesa a la compañía electrica.