Dos familias ontinyentinas fueron citadas recientemente por la Guardia Civil de Carlet a solicitud del equipo de investigación de la Comandancia de Melilla, al tener sospecha sobre la procedencia de dos niñas, hoy en día mujeres, nacidas en 1978 y 1979.
Desde hace más de un año la Guardia Civil de Melilla trabaja para destapar una trama de compraventa de bebés marroquíes que habrían sido ilegalmente adquiridos por parejas españolas en las semanas siguientes a su nacimiento en el país magrebí. Una vez en España, los padres inscribian a los niños en el Registro Civil como hijos propios.
Ya se han esclarecido 28 casos de bebés procedentes de Marruecos, introducidos y vendidos en España. Las compraventas se realizaron hace más de 30 años, desde la década de los cincuenta hasta los años 80, por lo que el delito ha prescrito en la mayoría de casos.